Es vital que a todos los niños entre 12 y 24 meses de edad se le haga la prueba de rutina en sangre para detectar la posible exposición de plomo.
Debes saber qué ninguna exposición al plomo es segura. Cualquier cantidad que se detecte debe ser monitoreada, y si es una cantidad elevada, las pruebas de seguimiento se deben hacer bajo una estricta supervisión médica.
Pero no solo los niños de 12 a 24 meses están en riesgo de padecer condiciones de salud por su exposición al plomo. Los niños de todas las edades e inclusive los adultos involucrados en actividades o trabajos en los que se exponen al plomo, deben hacerse la prueba para descartar cualquier impacto en su salud.
La urgencia para hacerse la prueba y la frecuencia con que tendrá que hacerla, va a depender del nivel de riesgo al que esté expuesta la persona. Se consideran parte del grupo de alto riesgo los niños que residen en viviendas que tienen pintura a base de plomo o asisten a escuelas o están en comunidades contaminadas. Así como las personas expuestas al plomo en su trabajo o en actividades que practican.
Generalmente los proveedores de atención médica están familiarizados con el nivel de riesgo en la comunidad a la que sirven. Pero tu salud es tú responsabilidad, el plomo como metal pesado se acumula en el cuerpo y es perjudicial. En mi curso para protegerte del plomo te enseño cómo informarte y proteger tu salud.