Foto: José Caruci
El Cardinalis cardinalis es el ave estadal, emblemática de Kentucky. Con su brillante plumaje rojo, propio de los machos y más pardo en las hembras, se adaptó muy bien a la presencia humana que se emociona con su canto melodioso. Con su cresta prominente y la cara negra alrededor del pico, los puedes ver en bosques, jardines y áreas suburbanas.
¡Me encanta cómo cantan! Tanto el macho como la hembra cantan, lo cual no es tan común entre las aves del norte que solo suele cantar el macho que es el responsable de defender el territorio. Al igual que nosotros, cantan porque están felices, también para marcar territorio y para atraer a la hembra. Entre marzo y julio su canto se vuelve más intenso porque es la temporada de reproducción.
Un dato muy curioso es que logran cambiar el tono y el patrón de su canto, incluso pueden imitar el canto de otras especies. Obviamente éstas destrezas les son de utilidad para evadir a sus depredadores y hasta para conquistar pareja. Son habilidades que contribuyen a su resiliencia.
Los cardenales se alimentan de semillas, frutas y pequeños insectos. Sus vecinos humanos saben bien lo que les gusta y hacen disponibles diversas fuentes de agua y comederos con las semillas adecuadas para apoyar su supervivencia y bienestar.
La población del cardenal es estable, principalmente por su gran capacidad de adaptación. Cuando nuestra relación con ellos es informada y consciente, contribuimos a su conservación. Por ejemplo, los cardenales rojos construyen sus nidos en arbustos y árboles bajos; si plantamos arbustos y árboles nativos en nuestros jardines y en los espacios públicos, proveemos un hábitat seguro para ellos. También los protegemos al evitar el uso de pesticidas y herbicidas en lugares que puedan afectar su salud y la de otras aves.
Mercedes es venezolana y me cuenta que ver los cardenales en Kentucky la hace sentirse como en casa. De hecho, uno de los espacios que más disfruta de su hogar es el balcón, y ella sabe que los cardenales, como cualquier otra especie, son vulnerables en la ciudad. Por eso, les brinda agua y alimentos. Cuando le pregunté qué les pone de comer, me dijo: "Les pongo semillas con pimienta para mantener alejadas a las ardillas, ya que ellas pueden sentir el picante, pero los cardenales no."
Efectivamente, no podría estar más orgullosa de una líder como Mercedes, es toda una EcoInfluencer. La técnica de añadir pimienta a las semillas de alimento para aves mantiene alejadas a las ardillas y es segura para las aves. Los cardenales ni se molestan con la capsaicina porque no la detecta su paladar, lo que les permite consumir estas semillas sin problemas, mientras que las ardillas encuentran el picante desagradable y evitan los comederos que la tienen.
La capsaicina no afecta el sistema digestivo de las aves como lo hace con los mamíferos. Las aves no tienen receptores para la capsaicina. Esto significa que pueden consumir alimentos tratados con capsaicina sin experimentar el ardor que sienten los mamíferos, incluyendo las ardillas. Puedes encontrar estas mezclas de semillas tratadas con pimienta en tiendas especializadas en productos para aves o en línea.
¿Sabías Qué?
¡El cardenal rojo es mucho más que una hermosa ave! Es considerado un símbolo de amor, lealtad y espiritualidad. Muchas personas creen que la presencia de un cardenal rojo significa que un ser querido fallecido está cerca, brindando consuelo y recordándonos su amor eterno. Además, observar a estas aves puede ser una experiencia profundamente significativa, conectándonos con la naturaleza y con nuestros seres queridos de una manera especial.
La próxima vez que veas un cardenal rojo en tu jardín, recuerda que podrías estar recibiendo un mensaje lleno de cariño y espiritualidad y dedica tiempo a conocer sobre los gustos de las aves en tu area para que tengas balcones o jardines amigables con la vida silvestre.
Tengo muchas cosas que compartir contigo sobre cómo relacionarnos de manera respetuosa y consciente con los cardenales, en mi blog puedes leer el artículo completo.