Protección de los Trabajadores contra los Efectos del Calor: Prevención y Respuesta ante Enfermedades Relacionadas con el Calor
Sin importar con quién hables en cualquier parte del mundo, la frase más común de hoy es: ¡Qué calor!
En los últimos años, las cifras de trabajadores que pierden su vida a causa del calor van en aumento, y otros miles se enferman debido a la exposición a las altas temperaturas en el lugar de trabajo.
Aunque este peligro está presente a diario y no solo durante las olas de calor, parece que no todos están dispuestos a tomarse el tiempo de tomar acción para conocer qué hacer y qué no hacer para evitar un golpe de calor.
Lo más lamentable es que tanto la muerte como las enfermedades relacionadas, que pueden variar desde calambres leves hasta golpes que amenazan la vida, son completamente prevenibles si se toman las precauciones adecuadas.
¿Qué son las Enfermedades Relacionadas con el Calor?
Cuando un trabajador está expuesto a las altas temperaturas que ahora experimentamos, la necesidad del cuerpo de regular su temperatura lo lleva a aumentar la frecuencia cardíaca y la sudoración.
Cuando las condiciones lo permiten, estas medidas son suficientes y el cuerpo se autoregula. Pero cuando las condiciones son extremas, la temperatura corporal suele elevarse a niveles peligrosos, lo que resulta en la enfermedad por calor.
Los signos de esta condición incluyen desde síntomas leves, como dolores de cabeza y náuseas, hasta señales de emergencia, como desmayos o convulsiones.
Reconocimiento y Respuesta ante la Enfermedad por Calor
Es crucial reconocer los síntomas de la enfermedad por calor a tiempo para prevenir emergencias médicas.
Los trabajadores deben estar capacitados para identificar en sus compañeros y en ellos mismos que están sufriendo la enfermedad por calor, para actuar rápidamente y evitar que el caso llegue al punto de ser una emergencia.
Y si llega a ser una emergencia, deberían tener las habilidades necesarias para responder en la medida de sus posibilidades. Además de tener un plan claro que seguir y los recursos necesarios para asegurar la vida.
Las medidas inmediatas incluyen enfriar al trabajador, moverlo a un área más fresca y proporcionar agua.
Factores de Riesgo Ocupacionales y Personales
El riesgo de sufrir enfermedades relacionadas con el calor depende de múltiples factores. Por eso, a la hora de planificar la respuesta a los riesgos asociados a las temperaturas, hay que tener en cuenta las condiciones ambientales como la humedad, la exposición al sol y el tipo de trabajo que se realiza.
También hay que considerar los factores personales de cada trabajador, sus condiciones de salud e inclusive sus hábitos de alimentación e hidratación. Esto incluye su salud general, el uso de medicamentos y sus características físicas, las cuales pueden aumentar su vulnerabilidad frente al calor.
Estrategias de Prevención
Aunque pueda sonar a la recomendación de una madre sobreprotectora, la realidad es que la ciencia ha probado que los trabajadores deben pasar por un proceso de aclimatización para preservar su salud.
De hecho, cada semana se debe comenzar el proceso de aclimatización. Cada vez que el trabajador se ausente de la jornada laboral por un día, se debe empezar el proceso, porque el cuerpo necesita ajustarse a las exigencias de los climas extremos o sufrirá.
La ley establece que los empleadores deben implementar un programa de prevención de enfermedades relacionadas con el calor con este propósito.
La exposición, la duración y la intensidad de las tareas de los trabajadores, se debe aumentar en una forma progresiva cuando se trata de ambientes calurosos para que el cuerpo se ajuste sin riesgos.
En la practica, también se modifican los horarios de trabajo para evitar tareas al aire libre durante las horas más calurosas del día.
Medidas Esenciales para Reducir el Riesgo de Enfermedades por Calor
- Programar actividades exigentes en horarios adecuados
- Programar las actividades más exigentes durante las primeras horas de la mañana o al final de la tarde reduce significativamente el riesgo de enfermedades por calor.
- Los empleadores deben ser flexibles y ajustar los turnos de trabajo según las condiciones climáticas.
2. Provisión de descansos frecuentes en áreas frescas
- Estos descansos permiten que el cuerpo se recupere y reduzca su temperatura interna.
- Las áreas de descanso deben estar a la sombra y contar con ventilación adecuada. Deben ser fácilmente accesibles para todos los trabajadores.
3. Suministro de agua potable y fomento de la hidratación
- Es vital proporcionar agua potable en cantidad suficiente y fomentar su consumo regular.
- La hidratación constante ayuda a reponer los fluidos perdidos por el sudor y mantiene al cuerpo funcionando correctamente.
- Los empleadores deben asegurarse de que el agua esté siempre disponible y de que los trabajadores tengan oportunidades frecuentes para beber.
4. Uso de vestimenta adecuada para el calor
- Asegurarse de que los trabajadores estén adecuadamente vestidos para el calor es crucial.
- Ropa ligera, de colores claros y que permita la transpiración ayuda a mantener el cuerpo fresco.
- Los empleadores pueden proporcionar uniformes apropiados o establecer pautas sobre la vestimenta adecuada para las condiciones de calor.
Control de Estrés por Calor en Espacios Interiores
No solo los trabajadores al aire libre están en riesgo; aquellos que trabajan en espacios interiores con fuentes de calor también pueden estar expuestos a peligros significativos. Es fundamental mejorar la ventilación, utilizar aire acondicionado cuando sea posible, y emplear barreras reflectantes para reducir la acumulación de calor en interiores.
Derechos de los Trabajadores y Responsabilidad de los Empleadores
Los trabajadores tienen el derecho a condiciones de trabajo que no pongan en riesgo su salud.
Es responsabilidad de los empleadores asegurar un ambiente seguro, proporcionar la capacitación necesaria, y monitorear continuamente las condiciones laborales para prevenir la enfermedad por calor.
La implementación de estos enfoques puede salvar vidas y mejorar la seguridad en el trabajo. Los empleadores deben tomar medidas proactivas para mitigar los riesgos asociados con el calor y proteger a sus empleados de enfermedades graves o fatales. Y los trabajadores deben informarse y actuar, porque a fin de cuentas, se trata de su propia vida.
Para más información, OSHA ofrece recursos adicionales sobre la prevención de enfermedades relacionadas con el calor en su sitio web.